Actualizado a 21 de noviembre de 2024

Arte Realista del siglo XIX

"Autorretrato" (1845); por G. Courbet
"Pronto reinó el silencio en el comedor; los huéspedes se separaron para dar paso a tres de aquellos hombres, todos los cuales apoyaban la mano en el bolsillo lateral, donde llevaban una pistola cargada. Dos gendarmes que seguían a los agentes ocuparon la puerta del salón y otros dos aparecieron en la de la escalera. Los pasos y los fusiles de varios soldados resonaron en el pavimento guijarroso que bordeaba la fachada. Desapareció cualquier esperanza de huida para Burla-la-Muerte, sobre el cual se posaron irresistiblemente todas las miradas. El jefe fue directamente hacia él; le dio en la cabeza un manotazo tan violento que le hizo saltar la peluca y dejó al descubierto la cabeza de Collin en todo su horror. Acompañadas de unos cabellos rojo ladrillo y cortos, que les daban un espantoso carácter de fuerza mezclada con astucia, aquella cabeza y aquella cara, en armonía con el busto, se vieron inteligentemente iluminados como si los fuegos del infierno los hubieran encendido. Todos comprendieron por Vautrin, su pasado, su presente, su futuro, sus doctrinas implacables, la religión del placer, la majestad que le daban el cinismo de sus pensamientos, de sus actos, y la fuerza de su organismo adaptado a todo. La sangre se le subió al rostro y sus ojos brillaron como los de un gato montés. Dio un brinco con un movimiento tan enérgico, dio tales rugidos, que arrancó gritos de terror a todos los huéspedes de la pensión. Ante este gesto de león, y apoyándose en el clamor general, los agentes sacaron las pistolas. Collin comprendió el peligro que corría y dio de pronto la prueba de más alto poder humano. ¡Horrible y majestuoso espectáculo! Su fisonomía ofreció un fenómeno que no puede compararse más que con el de la caldera llena del vapor que levantaría montañas y que disuelve en un abrir y cerrar de ojos de una gota de agua fría. La gota de agua que enfrió su cólera fue una reflexión rápida como el relámpago. Sonrió y miró su peluca. 
-No es este uno de tus días corteses -le dijo el jefe de la policía de seguridad. Y tendió sus manos a los gendarmes, llamándoles con un gesto-. Señores gendarmes, ponedme las esposas. Tomo por testigo a las personas presentes de que no ofrezco resistencia." BALZAC, Honoré de (1834): Papá Goriot [pdf].

 Esquemas Pintura y Literatura del Realismo


"Un día, el más notable de todos los buenos del año, la víspera de Navidad, el viejo Scrooge estaba sentado a su bufete y muy entretenido en sus negocios. Hacía un frío penetrante. Reinaba le niebla. Scrooge podía oír cómo las gentes iban de un lado a otro por la calle soplándose las puntas de los dedos, respirando ruidosamente, golpeándose el cuerpo con las manos y pisando con fuerza para calentarse los pies. Las tres de la tarde acababan de dar en los relojes de la City, y con todo casi era de noche. El día había estado muy sombrío. Las luces que brillaban en las oficinas inmediatas, parecían como manchas de grasa enrojecidas, y se destacaban sobre el fondo de aquella atmósfera tan negruzca y por decirlo así, palpable. La niebla penetraba en el interior de las casas por todos los resquicios y por los huecos de las cerraduras: fuera había llegado su densidad a tal extremo, que si bien la calle era muy estrecha, las casas de enfrente se asemejaban a fantasmas. Al contemplar cómo aquel espeso nublado descendía cada vez más, envolviendo todos los objetos en una profunda oscuridad, se podía creer que la naturaleza trataba de establecerse allí para explotar una cervecería en grande escala. La puerta del despacho de Scrooge continuaba abierta, a fin de poder éste vigilar á su dependiente dentro de la pequeña y triste celdilla, a manera de sombría cisterna, donde se ocupaba en copiar cartas. La estufa de Scrooge tenía poco fuego, pero menos aún la del dependiente: aparentaba no encerrar más que un pedazo de carbón. Y el desgraciado no podía alimentarla mucho, porque en cuanto iba con el cogedor a proveerse, Scrooge, que atendía por sí a la custodia del combustible, no se recataba de manifestar a aquel infeliz que cuidase de no ponerlo en el caso de despedirle. Por este motivo el dependiente se envolvía en su tapabocas blanco y se esforzaba en calentarse a la luz de la vela; pero como era hombre de poquísima imaginación, sus tentativas resultaban infructuosas." DICKENS, Charles (1843): Canción de Navidad [pdf].


¿Qué es el Realismo? por Grupo Creha


"A la mañana siguiente se despertó tarde, tras un sueño agitado que no lo había descansado. Se levantó bilioso, irritado, de mal humor, y consideró su habitación con odio. Era una jaula minúscula, de no más de seis pies de largo, y tenía un aspecto miserable con su papel amarillento y lleno de polvo colgando en jirones de las paredes. [...] Le dió el golpe precisamente en la mollera, a lo que contribuyó la baja estatura de la víctima. Enseguida, le hirió por segunda y por tercera vez, siempre con el revés del hacha y siempre en la mollera. La sangre brotó cual una copa volcada, y el cuerpo se desplomó hacia delante en el suelo. El se echó atrás para facilitar la caída y se inclinó sobre su rostro: estaba muerta. Las pupilas de los ojos, dilatadas, parecían querer salírsele de sus órbitas; la frente y la cara muequeaban en las convulsiones de la agonía. [...] Donde he leído -pensó Raskólnikov prosiguiendo su camino-, dónde he leído lo que decía o pensaba un condenado a muerte una hora antes de que lo ejecutaran? Que si debiera vivir en algún sitio elevado, encima de una roca, en una superficie tan pequeña que sólo ofreciera espacio para colocar los pies, y en torno se abrieran el abismo, el océano, tinieblas eternas, eterna soledad y tormenta; si debiera permanecer en el espacio de una vara durante toda la vida, mil años, una eternidad, preferiría vivir así que morir. ¡Vivir, como quiera que fuese, pero vivir!". DOSTOIEVSKI, Fiódor (1866): Crimen y castigo [pdf].

"Tenía la Benina voz dulce, modos hasta cierto punto finos y de buena educación, y su rostro moreno no carecía de cierta gracia interesante que, manoseada ya por la vejez, era una gracia borrosa y apenas perceptible. Más de la mitad de la dentadura conservaba. Sus ojos, grandes y oscuros, apenas tenían el ribete rojo que imponen la edad y los fríos matinales. Su nariz destilaba menos que las de sus compañeras de oficio, y sus dedos, rugosos y de abultadas coyunturas, no terminaban en uñas de cernícalo. Eran sus manos como de lavandera y aún conservaban hábitos de aseo. Usaba una venda negra bien ceñida sobre la frente; sobre ella, pañuelo negro, y negros el manto y vestido, algo mejor apañaditos que los de las otras ancianas. Con este pergeño y la expresión sentimental y dulce de su rostro, todavía bien compuesta de líneas, parecía una Santa Rita de Casia que andaba por el mundo en penitencia. Faltábanle sólo el crucifijo y la llaga en la frente, si bien podía creerse que hacía las veces de ésta el lobanillo del tamaño de un garbanzo, redondo, cárdeno, situado como a media pulgada más arriba del entrecejo". PÉREZ GALDÓS, Benito (1897): Misericordia.


El Siglo XIX: La Pintura Realista from mercedes


ENLACES RELACIONADOS: Literatura por Wikipedia, J. M. González-Serna, ITE y CEIP Peñalta de Buitrago de Lozoya.

Arte del Realismo por Museo de Orsay, Algargos, Artecreha, Wikipedia 1 (Pintura) y 2 (Escultura), ArteHistoria y T. Pérez Molina; y en España por Algargos.
PRÁCTICA "Arte del Realismo y el Prerrafaelismo": ficha de la actividad y juego interactivo en Educaplay.
C. Corot y selección de obras por Museo Thyssen, La ciudad de la pintura, The complete works [english], Wikipedia, ArteHistoria, Gallery of art [english], Olga´s Gallery [english], BBC [english], Google Art Project, The National Gallery [english] y The athenaeum [english]; y vídeo tributo.
H. Daumier y selección de obras por La ciudad de la pintura, Daumier.org [english], Wikipedia, ArteHistoria, Gallery of art [english], Olga´s Gallery [english], Artble [english], The athenaeum [english], BBC [english], Google Art Project y vídeo Tributo a Daumier.
J. F. Millet y selección de obras por L´atelier Millet [français], La ciudad de la pintura, ArteHistoria, Wikipedia, The complete works [english], Gallery of art [english], The athenaeum [english] BBC [english] y Google Art Project; y vídeo tributo.
G. Courbet y selección de obras por Museo de Orsay, Museo Courbet, La ciudad de la pintura, ArteHistoria, Wikipedia, The complete works [english], Gallery of art [english], MET [english], The athenaeum [english], BBC [english] y Google Art Project; y vídeo tributo.
M. Fortuny y Marsal y selección de obras por ArteHistoria, La ciudad de la pintura, Wikipedia, Biblioteca Digital Hispánica, y Google Art Project; reportaje "La batalla de Tetuán" de La mitad invisible; y vídeo tributo.
Arte del Naturalismo por Museo de Orsay y ArteHistoria.


Los prerrafaelitas