Actualizado a 08 de abril de 2024

El Motín de Esquilache


"El Motín de Esquilache" (1864), por José Martí y Monsó.

Ninguna persona de cualquier calidad, condición y estado que sea, pueda usar en ningún paraje, sitio o arrabal de esta Corte y reales sitios ni en sus paseos o campos fuera de su cerca el citado traje de capa larga y sombrero redondo para el embozo; pues quiero y mando que toda la gente civil y de alguna clase, en que se entiende, todos los que viven de sus rentas o haciendas o de salarios de sus empleos o ejercicios honoríficos y otros semejantes y sus domésticos y criados que no traigan librea de las que usan, usen precisamente de capa corta (que al menos les falte una cuarta para llegar al suelo) o de redigot o de peluquín o pelo propio o sombrero de tres picos, de forma que de ningún modo vayan embozados ni oculten el rostro; y por lo que se refiere a los menestrales ya todos los demás del pueblo (que no puedan vestirse de militar), aunque usen de la capa sea precisamente con sombrero de tres picos o montera de las permitidas al pueblo ínfimo y más pobre o mendigo, bajo la pena por primera vez de seis ducados y doce días de cárcel, por la segunda doce ducados o veinticuatro días de cárcel [...]. Bando de Esquilache (1766).

Bando de Esquilache (fragmento película "Esquilache")

Yo el gran Leopoldo Primero Marqués de Esquilache Augusto / Rijo la España a mi gusto / Y mando en Carlos Tercero. / Hago en todo lo que quiero / Nada consulto ni informo / A capricho hago y reformo / A los pueblos aniquilo / Y el buen Carlos, mi pupilo / Dice a todo: ¡Me conformo!. Pasquín popular español (1766).

Esquema y mapa del motín

El marqués había dado unas providencias extremadamente violentas para hacer venir granos de todo el reino a costa de sumas considerables y de grandísima incomodidad y pérdida de los conductores, violentados en parte, y cuyos clamores aumentaban el número de los descontentos, que parecían comprarse con el mismo dinero que el rey gastaba diariamente para mantener el pan a un precio moderado. Por otro lado, se había dado una providencia violenta para prohibir los sombreros redondos o gachos y las capas de los embozados, permitiéndolas sólo de un cierto largo y sin embozo. Los alguaciles, abusando de su autoridad, como sucede demasiado a menudo, atacaban a las gentes en las calles, les cortaban ellos mismos las capas, les sacaban multas y cometían otras tropelías. [...] Séase por esto sólo o (como algunos pretenden) porque había quien, aprovechándose de esta buena disposición, tenía particular interés en excitar un movimiento popular, lo cierto es que en la tarde del día 23 de marzo de 66, domingo de Ramos, dos embozados se hicieron insultar e insultaron en la plazuela de Antón Martín; se defendieron y fue señal de reunirse la gente y empezar el motín. Una multitud [...] se acercó a palacio y a la casa del marqués de Esquilache, gritando: "¡Viva el rey y muera Esquilache!". GUTIÉRREZ DE RÍOS, C. J., VI conde de Fernán-Núñez (s. XVIII): Vida de Carlos III.

Leopoldo de Gregorio, marqués de Esquilache por Wikipedia
Audiovisuales "El marqués de Esquilache la lía parda" de Viajando por Madrid; y "Motín de Esquilache: conjura o revolución" de Miguel Arévalo
Podcast "Marqués de Esquilache" de Pasajes de la Historia de J. A. Cebrián; y "El motín de Esquilache" de Memorias de un tambor.
CineEsquilache (1989).